Hace unos días leí acerca de esta estrategia para motivar a nuestros hijos a probar nuevos alimentos y se las quiero compartir para que juntas lo intentemos.
Porciones pequeñas de alimentos nuevos o que no le gustan.
Una pequeña porción de algo es mucho menos intimidante que una porción recomendada. Si tu hijo no intenta probar un alimento específico, definitivamente no comerá el tamaño de porción recomendada que estás tratando de ofrecer. También está bien ofrecer menos, empieza con algo pequeño y sigue adelante.
Esto generará confianza en tu hijo a la hora de las comidas podrás notar mucho menos estrés y berrinches, además de que a ellos les gustará comer más y probar más alimentos con el tiempo.
Además, está bien aumentar el tamaño de sus alimentos favoritos para ayudar a generar esa confianza.
No te estreses o desesperes con la expectativa de que tienen que comer una cierta cantidad del alimento nuevo o que no le gusta.