La importancia de los garabatos de los niños es la activación de la imaginación y la motricidad fina desde temprana edad. Estos benefician el  desarrollo de sus capacidades y habilidades, además de que es una forma muy divertida para expresar sus emociones.

Al principio son trazos incontrolados, impulsivos,  que los niños realizan moviendo todo el brazo, desde el hombro además de que propicia la evolución de las primeras etapas del desarrollo artístico.

A medida que crecen y se desarrollan, las habilidades de los niños se fortalecen y adquieren nuevas destrezas para desarrollar mejor sus trazados, irán tomando poco a poco mejor forma, eligen mejor los colores y sus líneas son más definidas.

Los garabatos se dividen en diferentes fases y, a continuación, te explico las etapas iniciales.

 Garabato desordenado

En esta etapa, se observa el desarrollo físico y psicológico, y se encuentra entre los 18 meses y dos años de edad.

Es normal que sobrepase los límites de espacio del papel; la presión de los trazos varía y mira hacia otro lado mientras garabatea.

Garabato controlado

Esta es la fase perceptiva que manifiestan los niños desde los 20 a los 30 meses. A partir de aquí, los trazos empiezan a tener forma, ellos toman de mejor manera los colores y suavizan los movimientos al rayar. Las líneas son más largas y definidas.

Tu niño descubre que los movimientos que realiza con los colores sobre el papel tienen una conexión, por lo que existe una coordinación ojo-mano, es decir, que ya dirige la mano con su vista.

Garabato con nombre

Va desde los 30 hasta los 48 meses. En esta etapa, ya cuenta con más dominio de su motricidad y es capaz de explicar lo que dibuja. Generalmente, plasma en la hoja lo que observa o siente, aunque lo que traza no se parezca a la realidad.

Comienzan los trazos circulares, las líneas, los puntos, etc. También se empiezan a controlar los espacios. Cuando empieza a formar círculos, usa los colores en función de la realidad, y el garabato ya es representativo.

Garabato preesquemático

Este nivel va desde los 3 hasta los 7 años. Representa los objetos que ve, las personas y los animales. Estos dibujos se entienden un poco más, aunque las figuras humanas son un círculo para la cabeza y dos líneas para el cuerpo.

“La importancia de los garabatos de los niños recae en la activación de la imaginación y la motricidad fina desde temprana edad”

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