Hoy en día la mayoría de los niños pasan tiempo en la tecnología y dejan de jugar al aire libre y aunque a veces es muy cómodo para nosotros como papás, esto hace que dejemos a un lado todos los beneficios que tiene para su salud física, mental y emocional el estar en contacto con la naturaleza.
Ya que la primavera comenzó es el momento perfecto para salir a jugar y hacer actividades con nuestros hijos al aire libre, esto les permite cambiar la rutina y relajarse.
Sabemos que jugar al aire libre es positivo para todas las edades y no tenemos que esperar a cierta edad para que esto suceda, incluso desde bebés se pueden beneficiar de estar en contacto con la naturaleza.
Algunos de los beneficios de jugar al aire libre
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Los niños juegan con una sensación de libertad, incluso cuando estamos ahí para vigilar que todo esté bien. Es una experiencia distinta a la de jugar dentro dela casa
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Jugar al aire libre mejora el desarrollo físico, ya que hacen ejercicio, pueden correr, saltar y desarrollar nuevas habilidades.
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La actividad física les permite descargar energías y tensiones. Así, llegan a la casa mucho más relajados y duermen mejor.
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También es posible prevenir la obesidad infantil, ya que queman muchas calorías de una manera natural y saludable.
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Jugar al aire libre alimenta la imaginación y la creatividad. Inventan pasatiempos nuevos y son capaces de jugar con una rama o una piedra.
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El contacto con la naturaleza hace que se fortalezca el sistema inmunitario. Se hacen más resistentes a todo tipo de bacterias y al polvo.
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El contacto con el sol es fundamental en la absorción de la vitamina D y del calcio, lo que fortalece los huesos en crecimiento de los más pequeños. Pero claro, no olvides ponerle protector solar.
Jugar al aire libre es una excelente oportunidad para disfrutar y pasar tiempo en familia. Pueden organizar desde una caminata, hasta un picnic o playdate con amigos.
Si estás pensando en la próxima actividad con tus hijos, considera que esta sea al aire libre y pasar un buen momento con ellos. 🥳