Esto puede llegar a afectar varias áreas como: la motricidad, el lenguaje, el desarrollo cognitivo y socioemocional.
En el libro de Baby Learns la Psic. Stephany López nos cuenta que se considera que los primeros años de vida constituyen la etapa más importante del desarrollo del bebé y la que más influirá el resto de su vida, a corto y a largo plazo. Es una oportunidad irreversible que está en nuestras manos el día de hoy.
¿Qué sucede si mi hijo no recibe dicha estimulación durante sus primeros años de vida?
Esto no significa que ya nunca podrá aprender, sino que el proceso puede ocurrir con ciertas dificultades, las cuales pudieron haberse evitado y prevenido durante los primeros años de vida.
Hay que saber que cuando el potencial de un niño mayor está limitado, la flexibilidad del cerebro para moldearse es diferente a la que tuvo en los primeros años de vida. Aunque no es nula dicha posibilidad, el proceso de intervención se vuelve mucho más complejo y puede llevar mucho más tiempo.
Es por eso la importancia de la estimulación de nuestros hijos desde bebés, así podemos evitar pasar por la frustración de ver cuando nuestros hijos avanzan y crecen en edad, pero cada vez se vuelve mucho más complicado, lo cual puede reflejarse en un bajo rendimiento académico, que afecta también su desarrollo emocional.
Los indicadores de desarrollo nos ayudan a identificar cómo se desenvuelven nuestros hijos en cada una de las áreas según su edad.
Las áreas de desarrollo son las siguientes:
Desarrollo cognitivo: Es el proceso por el que una persona adquiere conocimientos sobre lo que le rodea y desarrolla así su inteligencia y capacidades. Involucra las habilidades mentales necesarias para poder realizar nuestras actividades de la vida diaria de manera asertiva.
Desarrollo físico: Esta área incluye la parte anatómica, motora y sensorial de los seres humanos. Se refiere al desarrollo de la motricidad fina y gruesa; es decir, a la coordinación de sus dedos, manos, brazos, piernas, pies y a sus respectivos movimientos.
Desarrollo del lenguaje: Es una parte sumamente importante en el desarrollo del niño, y se define como el sistema de comunicación que consta de la comprensión y expresión de un idioma. Involucra todos los signos, verbales o no verbales, para que ocurra la comunicación.
Desarrollo de la autonomía: Esta parte del desarrollo del niño es fundamental y debe ser prioridad en su educación, pues un niño autónomo debe ser capaz de realizar por sí mismo las actividades y tareas que correspondan a su edad.
Desarrollo socioemocional: Es el área que describe la forma en la que nos percibimos, la comprensión de la identidad y nuestras emociones. Implica que el niño se relacione de manera adecuada con los de su alrededor, además de conocer, comprender, expresar y manejar sus emociones de manera saludable.
Algunas de las señales que alertan el desarrollo de nuestros hijos los primeros años de vida son:
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Tarda más de un año en balbucear sus primeras palabras.
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No señala las cosas que le interesan.
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No muestra interés por los juguetes y los juegos.
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No puede imitar acciones o sonidos por más sencillos que sean.
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Comienza a dar sus primeros pasos cuando los demás niños de su edad caminan desde hace tiempo.
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No se integra con los demás niños de su edad para jugar.
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No reconoce dibujos, objetos o fotos de personas o cosas familiares y cercanas.
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No puede concentrarse en una actividad específica durante más de 10 minutos, pierde rápidamente la concentración o no presta atención a largas conversaciones, actividades, juegos, historias o cuentos.
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No sigue normas sencillas.
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No alterna los dos pies al subir escaleras.
El papel de nosotros, los padres, durante el proceso de aprendizaje de los niños es imprescindible para entender que la familia es un equipo dentro y fuera del hogar. La guía Baby Learns a través de un test muy fácil y práctico de llevar a cabo, te ayuda a conocer el potencial de desempeño de tu hijo en 5 áreas del desarrollo indispensables, tales como: área cognitiva, lenguaje, física, autonomía y socioemocional.
Después de obtener los resultados podrás identificar en qué área o áreas es necesario prestar más atención y, de esta manera, comenzar con la apropiada estimulación del niño según las actividades que te proponemos en esta guía.